Autor(es): María Dolores Morales
Resumen: A principios del siglo XIX la ciudad de México había adquirido gran importancia no sólo como capital de la Nueva España, sino también gozaba de un envidiable prestigio entre todas las ciudades del continente americano, habiendo sido considerada como la imperial, la insigne, la muy noble y leal ciudad. Su población de 124 000 habitantes, entre europeos, criollos, mestizos, indios, mulatos y negros, era mayor que la de cualquier otra ciudad americana.